La ley del más fuerte es un aforismo sobre el origen de la moral, con un sentido a la vez descriptivo y prescriptivo.
Descriptivamente, afirma que la visión de la sociedad sobre el bien y el mal viene determinada por aquellos que ostentan el poder, con un significado similar a "La historia la escriben los vencedores". Es decir, aunque todas las personas tienen sus propias ideas sobre el bien, solo las personas lo suficientemente fuertes como para superar obstáculos y enemigos pueden poner en práctica sus ideas e imponer sus propios estándares a la sociedad en su conjunto. Montague, siguiendo al filósofo anarquista Kropotkin definió la kratocracia o kraterocracia (del griego κρατερός krateros, que significa "fuerte") como un gobierno basado en el poder coercitivo, por aquellos lo suficientemente fuertes como para tomar el control a través de la violencia física o la manipulación demagógica.
"La ley del más fuerte" ha sido descrito como el credo de los regímenes totalitarios. El sociólogo Max Weber analizó las relaciones entre el poder del estado y su autoridad moral en Economía y Sociedad. Los estudiosos del movimiento realista de política internacional usan la frase para describir el "estado de la naturaleza" en el que el poder determina las relaciones entre los estados soberanos.
Prescriptivamente (o normativamente), la frase se usa a menudo de forma peyorativa, para protestar contra lo que se percibe como una tiranía. Jesús contradijo encarnizadamente la idea en las bienaventuranzas: "Bienaventurados los mansos... Bienaventurados los pobres en espíritu".
La frase también puede tener una connotación positiva en el contexto de la moral de amos o el darwinismo social, que sostienen que los miembros más fuertes de una sociedad deben gobernar y establecer los estándares de lo correcto y lo incorrecto, así como sus objetivos para el bien común.
Diría que la ley del más fuerte explica la ética y el surgimiento de la moral, como oposición a la anarquía.
ResponderEliminarBásicamente del desorden y el desgobierno surge el régimen del más fuerte, mientras que los estados, la ley y las autoridades morales/religiosas protegen a los más débiles. Esa sería su justificación.